El alcalde del municipio SantoDomingo Oeste José Andújar, dijo al periodico Diario Libre desconocer que en los terrenos protegidos donde se encuentra el munumento el “Palacete de Palavé”, o la llamada “Casa Grande”, ubicada en Hato Nuevo, está siendo invadida por desaprensivos para construir viviendas, como espacio verde privado para siembra de frutales o simplemente como propiedad particular de terreno.
Santo Domingo Oeste.- Los inmuebles de valor patrimonial mundial cada vez adquieren más valor para un público demandante tanto nacional como internacional que reconoce su belleza y su valor histórico, pero algunas de esas antiquísimas infraestructuras del país no cuentan con la promoción, la protección y el mantenimiento necesario que garanticen su conservación y sean atracciones para visitantes.
El “Palacete de Palavé”, o la llamada “Casa Grand
e”, ubicada en Hato Nuevo, Santo Domingo Oeste es parte del proyecto “La Ruta de los Primeros Ingenios Coloniales de América”, es una construcción colonial desde donde se administraban y se dirigían los ingenios. Hay quienes aseguran que esa casona era un lugar de la iglesia católica y otros entienden que probablemente perteneció a un hacendado de la época.
La edificación, construida originalmente de dos niveles, fue propuesta por la Dirección Nacional de Patrimonio Monumental ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) con la finalidad de que fuera declarado Patrimonio de la Humanidad en el año 2003, pero el proceso no se completó.
Sin embargo, por su valor histórico las autoridades y algunos ciudadanos han respetado ese bien y su entorno. Sin embargo, desde hace años la ocupación de sus áreas protegidas ha ido creciendo y achicando su área a tal punto que a menos de 20 metr
os de la edificación un supuesto ex oficial cercó un solar con una pared en bloques y malla ciclónica.
Colindantes también se ha cercado parte del terreno con alambres de púa, recientemente instalado y en la parte del área de amortiguamientos más de una decena de casuchas de hojalata, madera y zinc han comenzado a ser construidas, arrabalizando el lugar y restándole espacio al lugar protegido.
Santiago Duval, encargado de arqueología de la Dirección Nacional de Patrimonio Monumental, del Ministerio de Cultura, junto a Susana Terrero, encargada del departamento legal de la entidad y otros profesionales, realizaron un descenso para verificar la denuncia de ocupaciones del área protegida y los resultados fueron la confirmación de lo publicado en los medios de comunicación.
“Nuestra observación de campo encontró múltiples evidencias de ocupación ilegal en el entorno inmediato del bien patrimonial, razón por la cual se deben tomar acciones inmediatas, con el objetivo de garantizar la integridad del sitio y detener. Dentro del expediente de nominación del sitio, elaborado en septiembre del año 2003, localizamos una imagen en la cual se estableció el núcleo territorial presentado en la nominación, así como la zona de amortiguamiento del sitio”, indica el informe de la comisión remitido a los viceministros de Patrimonio Cultural, Gamal Michelén, y al director de Patrimonio Monumental, Juan Mubarak.
El descenso permitió confirmar la invasión paulatina del terreno para construir viviendas, como espacio verde privado para siembra de frutales o simplemente como propiedad particular de terreno.
Duval asegura que las imágenes de satélite muestran una ocupación d
el área protegida que se confirma con las divisiones y construcciones en el entorno del Palacete, que entran en el área de la nominación y afirmó que las autoridades tendrán la última palabra en cuanto a los que se hará con las personas que han invadido el área protegida.
Más atención de las autoridades
Diario Libre conversó con el alcalde José Andújar, de Santo Domingo Oeste, sobre las ocupaciones y la respuesta del edil es que desconocía la situación. “Voy a mandar a investigar eso”, respondió por la vía telefónica.
Pedro Agüero es uno de los empleados del Ministerio de Medio Ambiente encargado de mantener el ornato en el palacete y cuenta que si bien es cierto que en algunas partes se han estado adueñando de parte del área, tampoco se trata de una invasión.
Admite que algunas personas han colocado alambradas y han cercado espacios que se supone pertenecen al área protegida.
“No es que estén supuestamente invadiendo, son gente que han tenido su permiso quizás y que por el alejamiento de las autoridades cuando la ven floja han tomado algunas partes en las orillas, pero no es que están invadiendo las ruinas”, dijo.
En cuanto a la ruina dijo que ahora está mejor porque antes era un lugar donde la gente iba a tener relaciones sexuales y que ahora ve más interés de las autoridades en conservar ese monumento histórico.
“Ahora hay más control lo que si necesitamos es más apoyo de las autoridades para darle el mantenimiento que la ruinas merece. Necesitamos trimmer, machetes, lima fundas, para la basura, escoba, rastrillo y otros equipos”.
Las recomendaciones
La comisión de Patrimonio Monumental que encabezó Duval y que realizó el trabajo de investigación a solicitud de la ministra de Cultura, Carmen Heredia, hizo las siguientes recomendaciones:
Establecer, con carácter de urgencia un acuerdo interinstitucional entre la Alcaldía de Santo Domingo Oeste y los Ministerios de Cultura y Medio Ambiente, para la realización de un Plan de manejo del sitio, con el cual se garantice la gestión y protección del bien.
Elaborar un acuerdo con el Ministerio de Turismo, de modo que la recuperación del palacete, se incluya dentro de los planes de desarrollo de la oferta turística nacional, en el marco del turismo histórico y cultural.
Recuperar y refuncionalizar la edificación, a fin de que sirva como motor para la puesta en marcha de una casa de la cultura o sede del desarrollo de actividades culturales y comunitarias, sostenidas por el Ministerio de Cultura y la Alcaldía de Santo domingo Oeste.
Realizar un programa de actividades artísticas (conciertos, clases de pintura, etc) que motoricen el uso y conocimiento del lugar, de modo que las comunidades circundantes se empoderen del cuidado y protección de su patrimonio.
Fuente El Diario Libre