Por Ronny Mateo

Santo Domingo Oeste.- La lentitud con la que están operando las oficialías civiles y el nuevo sistema de legalización de documentos ha provocado la formación de largas filas de personas que a veces deben permanecer un día completo para poder obtener un acta.

Este periodista visitó las oficialías civiles de la segunda y cuarta circunscripción comprobaron las largas filas de personas en espera de un turno.

Al notar nuestra presencia, los ciudadanos se quejaban de la lentitud con la que operan los empleados de las oficialías, así como lo difícil que se torna el procesos.

No se respeta las medidas anti COVID-19

En  esos lugares, bajo la autoridad de la Junta Central Electoral (JCE), se observan largas filas de personas sin guardar el distanciamiento físico establecido por las autoridades para contrarrestar la covid-19, es decir, que se ha establecido un protocolo en ese sentido.

En la Oficialía del Estado Civil, 15ava. Circunscripción, en el municipio Santo Domingo Oeste, el orden “brilla” por su ausencia y solo se observaron dos miembros de seguridad tratando de apaciguar tomar el control de la situación, ante el caos provocado por muchos de los presentes.

En tanto empleados de las oficialías solo se limitan a decirle a los usuarios que esperen y tengan paciencia.


“El sistema está lento”, es la respuesta más común de los empleados ante los reclamos de la gente.

Proceso

Para obtener actas de nacimiento en las oficialías tienen establecidos tres pasos, en igual número de casillas, primero verificación del documento, segundo pago del mismo y por último su retiro. Hasta hace poco, solicitar un documento en las oficialías era un tramite rápido, pero ahora, resulta tedioso.

JCE no responde

Esta mañana tratamos de comunicarnos con la director de Registro Civil de la Junta Central Electoral, Rhina Díaz y no se logró en ese momento. Unas seis llamadas telefónicas les fueron hechas a la funcionaria. Esperábamos que Díaz diera su parecer sobre lo qué estaría provocando la aglomeración de personas en las oficialías.

Fuente: El Nacional