Por Nairobi Núnez

Santo Domingo Oeste.- Sentadas en un banquillo de los habilitados para la espera de familiares de pacientes con Covid-19 en el Hospital Marcelino Vélez Santana, del sector Herrera, se encontraba Massiel Garabito junto a su hermana mayor, quienes se mantenían atentas a la condiciones de salud de su progenitora de 60 años de edad, ingresada en el centro desde el sábado al ser diagnosticada con el virus.


Esta joven aseguró que desde las 9:00 de la mañana se encuentra en las afueras del centro ubicado en el municipio Santo Domingo Oeste,  la espera de que le den buenas nuevas sobre la situación de salud de su madre. “Ella está más estable, según me dicen los médicos, la están medicando…gracias a Dios no la entubaron”, expresó con voz amena.


Afirmó que desde la detección del virus en su madre, ha tenido que durar cada día desde las 9:00 de la mañana hasta las 6:00 de la tarde, para saber si ella necesita algo urgente, como medicamentos y productos de higiene personal.  


De igual forma, expresó que para poder comunicarse con su familiar tiene que solicitar a los enfermeros que le faciliten  un celular para poder hablar con ella por unos minutos.  “Yo hablo con ellos (los enfermeros) y me comunico con mi mamá para saber de ella”, dijo.


Excusas para no perder el empleo


Massiel, quien es empleada en el municipio Bávaro, Punta Cana, señaló que tiene que enviar una constancia a su empleo para que no le den de baja, ya que debe permanecer en las afueras del hospital, por si se requieren análisis o productos de higiene para la madre.



“Yo llevaré una constancia, para que no vayan a pensar que yo abandoné el trabajo”, declaró.


Diariamente muchos son los familiares de pacientes que deben de agotar horas y horas al igual que esta joven como si fuera una jornada laboral, debido a que no tienen ningún otro familiar que pueda atender a su pariente hospitalizado.


María Santos era otra de las que se encontraban en el hospital Francisco Moscoso Puello, de la zona norte del Distrito Nacional, a la espera también del progreso de salud de su madre, quien tiene 68 años.


La dama asegura que su progenitora fue ingresada el pasado lunes con dificultades para respirar y luego le detectaron el virus del Covid, por tanto los médicos procedieron a intubarla en el hospital por su condición de salud.


Mientras estaban sentadas en la acera del centro, junto a su hija y una nuera; realizaban cuentos y bromas con sus acompañantes para botar el estrés, aun con la pena de que su madre pueda empeorar en cualquier momento.


SEPA MÁS


Gastos.


María Santos indicó que ella y su hermana están suministrando todas las ayudas hasta que su familiar mejore.


Sin vacuna.


Sin embargo, esta apunta que no se ha colocado ninguna de las vacunas anticovid por problemas odontológicos.

Promesa.


El presidente Luis Abinader ha dicho que el toque de queda sería eliminado en las provincias donde el 70% de sus habitantes estén vacunados con las dos dosis.